La plegaria, el ayuno, las vigilias y las otras prácticas cristianas, son aparentemente buenas en sí mismas, pero no constituyen el objetivo de la vida cristiana. El verdadero objetivo de la vida cristiana consiste en la adquisición del Espíritu Santo de Dios. En cuanto a la plegaria, el ayuno, las vigilias, la limosna y toda buena acción hecha en nombre de Cristo, no son más que medios para alcanzar la adquisición del Espíritu Santo.
2 comentarios en “La vida cristiana bajo la acción del Espíritu Santo”
Paz y bien hn@s: El Creador del universo desea que me quede con Él; el Todopoderoso me pide que no me vaya, y yo, ¿quiero cumplir su deseo? La respuesta es algo personal porque depende plenamente de mí que se cumpla. Bendiciones
Paz y bien hn@s: El Creador del universo desea que me quede con Él; el Todopoderoso me pide que no me vaya, y yo, ¿quiero cumplir su deseo? La respuesta es algo personal porque depende plenamente de mí que se cumpla. Bendiciones
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